Esta semana he visto en televisión un programa de investigación sobre los supuestos fraudes de videntes, magos, tarotistas, etc. La conclusión del reportaje es que todos las personas de este mundillo son unos farsantes que buscan dinero fácilmente. Y no digo que no los haya, que los hay, pero conozco tarotistas honrados que hacen su trabajo lo mejor posible .
Por mi parte, me defiendo de la siguiente forma:
- Yo no voy diciendo que tengo un don natural de nacimiento. Lo mío es producto de casi 40 años de estudio, incluídos el hebreo y el árabe para poder estudiar desde la fuente los primeros libros esotéricos que fueron impresos y el estudio continúa, porque el conocimiento es infinito.
- Me intereso genuinamente en la persona, y si viene atribulada hasta que no se calma y despeja sus dudas no la dejo ir aunque se pase del tiempo establecido
- Mis clientes pueden contactar conmigo sin pagar nada cuando quieran
- Prefiero dar un servicio de calidad y no doy más de dos citas diarias, aún a costa de perder dinero, porque necesito estar despejada, y lúcida para cualquier consulta
- Cuando el trabajo es vocacional se hace con pasión y vocación de servicio todo fluye, los clientes salen satisfechos y repiten y yo me siento realizada y agradecida al Universo por haberles dado un poco de paz o luz.
Así que estos periodistas pueden reflejar el lado oscuro de nuestra profesión pero que para nada se corresponde con la total realidad.
Tarot presencial: Teléfono para citas 654700193
